Un año después de la muerte de Steve Jobs por fin hemos podido conocer a Venus, el yate de los sueños del que fuera CEO de Apple, y del que lamentablemente no pudo disfrutar debido a su prematuro fallecimiento. Una auténtica obra de arte flotante que nos ha dejado a todos boquiabiertos nada mas verlo.
Venus, Diosa del amor y de la belleza, fue el nombre que Steve Jobs eligió para el yate de sus sueños poco antes de su fallecimiento. Una embarcación de 80 metros de longitud, realizada en aluminio, y con un diseño que a nadie que lo vea dejará indiferente.
Una joya única de la que Jobs se sentía muy orgulloso, y que Walter Isaacson ya comentaba en su biografía:
After our omelets at the café, we went back to his house and he showed me all of the models and architectural drawings. As expected, the planned yacht was sleek and minimalist. The teak decks were perfectly flat and unblemished by any accoutrements. As at an Apple store, the cabin windows were large panes, almost floor to ceiling, and the main living area was designed to have walls of glass that were forty feet long and ten feet high. He had gotten the chief engineer of the Apple stores to design a special glass that was able to provide structural support. By then the boat was under construction by the Dutch custom yacht builders Feadship, but Jobs was still fiddling with the design. «I know that it’s possible I will die and leave Laurene with a half-built boat,» he said. «But I have to keep going on it. If I don’t, it’s an admission that I’m about to die.»
En su interior podemos encontrar 7 iMacs de 27 pulgadas que muestran los paneles de control de Venus. Sus amplios ventanales desde el suelo hasta el techo de los que disponen las zonas públicas de la embarcación, nos recuerdan en parte a los diseños de muchas de las Apple Stores repartidas por todo el mundo. Un barco minimalista pero cargado de detalles, algo que sin duda le encantaba a Steve y que fue mostrando poco a poco durante su vida al frente de Apple.
A nosotros verdaderamente Venus nos ha dejado impresionados, nunca antes habíamos visto un yate de estas características y con un diseño tan innovador y propio de la empresa de la manzanita. Allá donde quiera que se encuentre, seguro que Steve Jobs se siente muy orgulloso de él.
Vía | One More Thing / The Verge